Conectamos desde el momento que nos conocimos, cuando ni siquiera eras del tamaño de un zapato. Llegaste a mi vida de una forma sumamente inesperada, no pasaba por mi mente adoptar una mascota ni mucho menos un gatito, incluso debo confesar que ni siquiera era el plan inicial pues mi pareja de aquel tiempo te había adoptado después de que fuiste rescatada de un bote de basura donde alguna persona sin corazón decidió dejarte a lado de tu hermanito. Supuestamente te quedarías con ella mientras yo solo te cuidaría los fines de semana; sin embargo, tú tenías otra idea: desde el primer momento tú y yo nos hicimos inseparables. Tú, toda chiquita, no querías irte de mi lado al terminar el fin de semana y yo solo contaba los días para volverte a ver.
Después de unos meses la decisión fue inevitable: decidimos que te quedarías conmigo los 7 días de la semana. Honestamente no sé cómo pasó pero sin saberlo, empezaba una época donde seríamos tú y yo para siempre.
Ahí estuviste, en las mejores y en las peores con tu carácter tan fuerte. Nunca te gustó que te cargara pero yo no podía evitarlo, solo quería abrazarte y llenarte de ese amor que me hacías sentir. Siempre te vi como mi pequeña, no solo mi mascota, sino como parte de mi familia. Despertabas en mí un instinto paternal hermoso, ese que no conocía.
Cuando salía de viaje o pasaba más de un día fuera de casa nunca dejé de extrañarte y tú no me lo perdonabas, notaba tus arrebatos aunque siempre estabas acompañada y más temprano que tarde estaríamos de nuevo jugando.
Ahora a ti te toca este último viaje, descansa y disfruta donde vayas. Hasta siempre.
4 comentarios
Isabel Núñez Méndez
Aunque nos separe el velo de la vida y la muerte, nuestro vínculo es eterno, y siempre te llevaré en mi corazón
Valeria Martínez
Aunque tus patitas ya no toquen el suelo, tu espíritu corre libre y feliz. Gracias por cada momento compartido.
Mónica Sánchez
Las estrellas brillan más en el cielo porque ahora hay un ángel peludo que ilumina la noche. Extrañaremos tu alegría y amor eternamente.
Fernando Pérez
Has dejado huellas imborrables en nuestros corazones y recuerdos que guardaremos por siempre. Descansa en paz, fiel amiga.
Los comentarios están cerrados.
Homenajes
Recuerdos (Otros servicios)
Otros servicios
Familia
[custom_familia]
Descansa en paz amiga.
Conectamos desde el momento que nos conocimos, cuando ni siquiera eras del tamaño de un zapato. Llegaste a mi vida de una forma sumamente inesperada, no pasaba por mi mente adoptar una mascota ni mucho menos un gatito, incluso debo confesar que ni siquiera era el plan inicial pues mi pareja de aquel tiempo te había adoptado después de que fuiste rescatada de un bote de basura donde alguna persona sin corazón decidió dejarte a lado de tu hermanito. Supuestamente te quedarías con ella mientras yo solo te cuidaría los fines de semana; sin embargo, tú tenías otra idea: desde el primer momento tú y yo nos hicimos inseparables. Tú, toda chiquita, no querías irte de mi lado al terminar el fin de semana y yo solo contaba los días para volverte a ver.
Después de unos meses la decisión fue inevitable: decidimos que te quedarías conmigo los 7 días de la semana. Honestamente no sé cómo pasó pero sin saberlo, empezaba una época donde seríamos tú y yo para siempre.
Ahí estuviste, en las mejores y en las peores con tu carácter tan fuerte. Nunca te gustó que te cargara pero yo no podía evitarlo, solo quería abrazarte y llenarte de ese amor que me hacías sentir. Siempre te vi como mi pequeña, no solo mi mascota, sino como parte de mi familia. Despertabas en mí un instinto paternal hermoso, ese que no conocía.
Cuando salía de viaje o pasaba más de un día fuera de casa nunca dejé de extrañarte y tú no me lo perdonabas, notaba tus arrebatos aunque siempre estabas acompañada y más temprano que tarde estaríamos de nuevo jugando.
Ahora a ti te toca este último viaje, descansa y disfruta donde vayas. Hasta siempre.
Author: Funeraria de David
Autores